Ir al contenido principal

Noche en San Patricks con una libreta

Hay que escribir. Sea como sea. En un bar atestado de gente también vale. Con un franchute por ahí con una partida de ajedrez pendiente. Con el móvil de su chica porque él no tiene Whatsapp, etc. Con Wasmo a un lado y Merce al otro, y con la patente ausencia de Gianella y Dani Jaén. Malagente. Dice Merce que le dan ataques de escribir. Que el otro día, en la Pécora, le dio por escribir durante 3 horas y media. Dice Wasmo que es uno de los mejores escritores de España (se descojona). "Y apunta: y lo digo sin equivocarme".
Wasmo: "Hoy he pensado una cosa: por qué no se puede hacer del mundo una cosa más humana."
Merce: "¿Como qué?"
W: Comfort dentro de la banalidad.
M: ¿Le das la vuelta?
W: Si ya estoy vivo, han elegido mis padres, que son unos putos guarros, por mí, y tengo que estar aquí.
M: ¿Para conseguir qué?
W: Para hacer una paella gigante y que la gente la fume (...). Me ralla todo, me ralla todo...
M: Le ralla todo, es normal.
W: El punki se ha muerto.
M: ¿Qué punki?
W: ¡Se ha muerto!
M: ¿Se ha muerto?
W: Se ha muerto, ¿no te das cuenta?
M: No me doy cuenta...
W: Toda la vida y toda la espontaneidad están muertas. Me cagüen la puta, voy a prender fuego a la peluca de Satán. (A mí:) ¿Tú qué escribes?



Wasmo a Merce: ¿Te puedo decir una cosa que siempre he pensado?
Merce: Sí.
W: Me pareces un muñeco.
M: Qué horror, ¿cómo? ¿Como un dibujo animado?
W: Es que pones expresiones muy raras. (Tras leer mi libreta:) Y Samuel a veces no pone no pone expresiones, es un cabrón de mierda. Hijo de la gran puta, cabrón de mierda. Ojalá vengan 7 demonios y se corran sobre su cadáver.
M: (repite lo último).
S: ¿Algo que añadir?
W: No, aunque eso es algo suficiente, que alguien te desee eso. Es para plantearse algo. Un poema: los superhéroes también se suicidan / el cielo es un lugar muy bajo comparado a donde voy a dejarte la autoestima / aunque soplen malos vientos, primo, me río del Katrina / solo veré la luz cuando me coman las anguilas / después de verme desnudo me llaman nigga / el día que a ese cerdo le llegue su San Martín, San Quintín aplaudirá porque San Martín será en comisaría / suena el teléfono, hermano, malas noticias: / acaba de morir la persona que más querías.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ha muerto un hombre alegre

Nos dejaron sin cigüeñas. Nunca fueron nuestras. Tampoco suyas. Ha muerto un hombre alegre. Tras la pena, hay que volver a la alegría, más alegría aún: más fuerte, más plena, más tranquila, más sincera, más sencilla, para compensar la que se fue. Unas pocas palabras pensando en  Luis Eguílaz , el día en que descubro que nos ha dejado.

Estar a punto de morir

Estar a punto de morir parece una buena forma de conseguir que te valoren como persona. Aunque es mejor morir. Lo preocupante no es acumular mierda dentro, lo preocupante es no cagar. Por desgracia, siento que ya sé todo lo que necesito. Por suerte, todavía no es suficiente. No lo digo por despecho ni rencor, simplemente, algunas tías buenas son especialmente malas. Sin mí no soy nada. Poeta atormentado, poeta petardo. Lista de la compra: cerveza sin alcohol, fruta, canela en rama. Cuidado con los enfermos de literatura: se permiten mentir por belleza.

Diario de sueños: cuatro sueños en una semana

Hace tiempo tenía un diario. Ahí empecé a escribir mis sueños, entre otras cosas. Llegué a apuntarlos frecuentemente. Con el tiempo, empecé a dejar de escribir lo que me pasaba y mis reflexiones, pero seguí escribiendo los sueños que tenía. Así, pasó a ser, más bien, un diario de sueños . Con el tiempo, también abandoné esa costumbre. Lo he comprobado: el último sueño apuntado en racha se quedó en abril de 2016. Después, unas pocas notas esporádicas, hasta agosto de 2018 (y una más, solo una, en 2019). Muchas veces, desde entonces, he soñado cosas que he contado a alguien, o que me guardaba celosamente, y me solía decir que debería volver a escribirlas en el diario de sueños, pero no lo hacía. Muchas veces recordaba los sueños a primera hora y, por no apuntarlos enseguida, volaban al olvido, horas después. Esta semana, por lo que sea, he podido recordar y recoger, bien y pronto, varios sueños, con lo que he vuelto a guardarlos con cierto orden. Esta vez -de momento y para variar- en ...